El día 7 de abril, el periódico The Guardian saltaba con la investigación de Cruelty Free Int. (https://www.theguardian.com/environment/2021/apr/08/undercover-footage-shows-gratuitous-cruelty-at-spanish-animal-testing-facility-madrid-vivotecnia) “Imagenes encubiertas revelan crueldad gratuita en un Laboratorio de Experimentación con animales de España” hablando de todo lo que contiene el vídeo publicado por esta organización y que denuncia los malos tratos hacia los animales que se usan en experimentos dentro de este laboratorio.
Vídeo: Test de Toxicidad en animales, Vivotecnia, España
Este vídeo fue grabado durante 2 años por una activista encubierta después de recibir una denuncia de un antiguo trabajador del laboratorio.
“Las imágenes del denunciante muestran animales objeto de burlas y abusos. Vemos a un miembro superior del personal dibujando una cara en los genitales de un mono mientras el animal es inmovilizado en la mesa y se le extrae sangre; vemos perros y ratas balanceados y animales cortados sin anestesia. El vídeo muestra monos jóvenes físicamente restringidos, sin sedación para reducir su ansiedad; monos golpeados en la cabeza, tirados de su piel y jurados por luchar. Vemos conejos luchando con sus dispositivos de sujeción, cayéndose y sufriendo graves lesiones en la columna.” - Cruelty Free International.
Rápidamente varios periódicos y medios españoles publicaron la noticia: 20 minutos, https://www.20minutos.es/noticia/4650540/0/video-maltrato-animal-laboratorio-investigacion-madrid/, La Vanguardia https://www.lavanguardia.com/natural/20210409/6639126/maltrato-animal-empresa-madrid-vivotecnia-crueldad-experimentacion-animales.html y algunos más. La noticia se hizo viral y Change.org comenzó una campaña para pedir el cierre de Vivotecnia https://www.change.org/p/mart%C3%ADn-consejera-de-medio-ambiente-ordenaci%C3%B3n-del-territorio-y-sostenibilidad-madrid-cerrar-vivotecnia-ahora, mientras varios Santuarios, asociaciones y organizaciones por los derechos de los animales hacían un llamado a una concentración en frente de las instalaciones del Laboratorio el día 10 de Abril de 2020.
Nos dirigimos para allá el día sábado 10 de abril y pudimos hacer un vídeo. A las puertas del laboratorio nos esperaba la guardia civil y la seguridad privada del lugar, la gente iba llegando poco a poco, mientras la noticia se viralizaba cada vez más. Podíamos ver desde dentro de las instalaciones personas con sus teléfonos grabándonos a pesar de todo. El día transcurrió de forma pacífica y siempre tuvimos en cuenta las medidas para el Covid. También se anunciaba las intenciones de dormir en el lugar hasta liberar a los animales.
El domingo 11 de abril la Comunidad de Madrid emite un comunicado anunciando el cese de la actividad en Vivotecnia, y a su vez, Sergio García Torres, director de la Dirección General de Derechos de los Animales del Gobierno de España, comunicaba que los animales del laboratorio estaban siendo examinados por un veterinario de la comunidad y pasarían a disposición de los Santuarios y organizaciones animalistas el día lunes 12 de abril.
Gracias a la rápida actuación de activistas, medios y personas comprometidas hemos logrado liberar a los animales, víctimas de la experimentación con animales de este laboratorio.
En Vivotecnia se torturaban animales y se incumplían leyes europeas, mientras se hacía eco de una supuesta política de transparencia y bienestar animal.
Y a pesar de que ahora mismo no podemos ver su página web y comprobar de primera mano las irregularidades en sus políticas, esta terrible experiencia ha sacado a la luz los resultados de una tradición científica completamente anticuada y poco adaptada a los nuevos avances y nuevas exigencias, combinada con una ley de protección animal permisiva e incongruente.
No nos vale solo con condenar a Vivotecnia por incumplir las leyes o hacer una reforma de las leyes actuales. Queremos leyes que protejan a los animales de verdad, queremos el fin de la experimentación con animales y queremos a los animales libres fuera de jaulas y laboratorios.
Autora: Estefanía Serna